Amigos de La Tana, como dice Javier en Facebook, “pues parece que va llegando el verano”…
El que si ha llegado también es Alfonso, amigo y colaborador de La Tana, con su tremenda Kawasaki de 750 cc, dispuesto, no a correr, sino a “volar” con sus cargas de gollerías para que los Amigos de La Tana, no sufran desmayo por falta de alimento.
Tampoco ha faltado a la cita el barco con toda la dotación familiar, preparados para la navegación costera o de altura.
¡Hasta la Sirenita de Copenhague ha venido!
Uy, se conoce que el calor nos altera, pues ahora recuerdo que es una estatua de bronce y no viaja.
Los Amigos de La Tana seleccionan,
se reparten por los distintos emplazamientos,
y Antonio -¡qué calor!-, reparte bogavantes a la plancha, a diestro y siniestro.
José, nuevo colaborador de La Tana, ha seleccionado dos hermosas langostas para atender un encargo.
Vemos que las dos son hembras, y han dado un peso de casi cuatro quilos entre las dos.
Mesa preparada
y en la foto aparecen tres diferentes posiciones.
En primer plano están las langostas presentadas y a la espera del destino final; bellavista, americana, a la plancha, gratinadas…
A continuación vemos a parte del equipo a la espera –waiting- de instrucciones.
Y finalmente, recién desembarcados, vemos a los Amigos de La Tana, que deben informarnos del destino final de los expectantes crustáceos.
Conocedores ya de la suerte que les ha correspondido a los bichos, el amigo Mojamed, maestro con el cuchillo para peces y marisco, -si lo descubren los japoneses, nos lo secuestran- ha preparado las langostas para su última fase.
Pues bien, la decisión ha sido “Langosta frita”. Cincuenta años entre platos y platillos, y estrenamos receta.
Javier y yo, nos hemos prometido que si nos toca el cupón –nos vale con un premio pequeño- probamos.
Amigos de La Tana,
¡nos vemos en el Paseo de la Barra!
No hay comentarios:
Publicar un comentario