Semana del mes de enero fresca de clima, pero muy soleada. Si nos hubieran caído 20 millones -lotería-, incluso a pesar
del impuesto,
nos quedaba para instalarnos en el Paseo
de la Barra y alrededores.
Frutos de la huerta, vino
del Campo de Cartagena -Viña Galtea
2012- y
calamar
de potera, rey del invierno en la zona
que en compañía de lechas, lubinas, dentones y sargos,
sin olvidar los salmonetes, son las maravillas de
lugar.
Andrés,
atendiendo sugerencias de Javier,
nos preparó un bonito en escabeche
con técnica japonesa -casi crudo-
que resultó perfecto para una cata de
vino que teníamos pendiente;
a la que añadimos también
alguna gamba, solo por mantener el nivel.
The
Poisonous Worm of Envy, leemos en la etiqueta y que según el
diccionario sería: El gusano venenoso de la envidia,
pero la traducción castiza nos deja lo de envidia
cochina, y con este nombre se ha quedado el vino, para
engrosar la ya larga lista
de caldos con nombre original.
La foto que sigue a
continuación no tiene nada que ver con la cata que comentamos. Es una historia
diferente.
La semana pasada
comentábamos que habíamos visto barcos, canoas, motos
de agua y tablas, pero Javier -siempre
se nos adelanta- nos ha mostrado que también existen las Flyboard,
¡el
nuevo deporte que ha revolucionado el mundo!
Amigos
de La Tana, ahí va, de amanecida, el crucero -seguro que el Costa
Concordia no es- vía Cartagena. ¡Siempre
nos queda la libertad de soñar!
Hola Sebastián y amigos de La Tana:
ResponderEliminarSin duda, el Flyboard es un deporte divertido y también atrevido, para cuya práctica se necesita, sobre todo, no paceder de vértigo. Mucho más tranquilo y relajante es sentarse en el Paseo de La Barra y degustar el bonito en escabeche que ha preparado Andrés, eso sí, regado con una copa de "envidia cochina".
Que paséis buena semana.
Un saludo.
Pablo,
desde Guadalajara.
Amigo Pablo:
ResponderEliminarNo se como andarás con lo del vértigo. En mi caso, enfrentarme con el “envidia cochina” es lo más atrevido que me puedo permitir.
Un saludo,
Sebastián Damunt